Columna del Padre Tomás



En la antigüedad se solían marcar los caminos con postes o pequeñas columnas. Eran los puntos de referencia para ir haciendo camino. A veces también se usaban las columnas para recordar hechos, personas, acontecimientos a no olvidar.

Las columnas del Padre Tomás del Valle son un poco ambas cosas. Piedras que marcan el camino que se va haciendo cada día, sin rutas, sin marcas. Y también Columnas que recuerdan hechos, personas, acontecimientos. En ambos casos no es otra cosa que un intento de trazar caminos en la aldea global.

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martes, 27 de mayo de 2014

LAS DIVISIONES DEL PAPA


Jerusalén, Mayo 27, 2014
Finalizando la segunda guerra mundial se reunieron los líderes del mundo libre en la ciudad de Yalta.
Allí se repartieron el mundo.
Uno de los presentes, Joseph Stalin cuestionó con cuantas divisiones militares contaba el Vaticano.
La opinión vaticana no era bien vista por el dictador soviético.
Francisco, el actual Papa, acaba de regresar de un viaje a una de las zonas más conflictivas del mundo.
Regresa de pasar revista a sus tropas de ocupación en el área. Ha pasado revista a una de sus divisiones, la de la Custodia de Tierra Santa, la cual, según datos recientes y aproximados, está servida por cerca de 300 frailes franciscanos procedentes de más de 30 naciones distintas, que atienden 74 Santos Lugares de Israel, Palestina, Jordania, Siria, Chipre… 
La Custodia Franciscana de Tierra Santa ejerce el ministerio pastoral en 29 parroquias y en 79 iglesias y dirige 16 escuelas (10.000 alumnos, 400 profesores, 250 puestos de trabajo); cuenta asimismo con cinco hospederías (Casa Nova) con 500 plazas para peregrinos, tres residencias de ancianos y dos internados para huérfanos. 
Ayuda a familias, dotándolas de viviendas (48 entregas, 24 en construcción), a jóvenes con becas de estudios, a niños en guarderías y centros de día.
Asimismo promueve la acción científica, cultural y ecuménica a través de distintos centros docentes y del acompañamiento y asistencia espiritual a peregrinos.
Esta división Fundada por San Francisco de Asís en 1217, tras su peregrinación a la zona y su encuentro memorable y hasta enigmático con el sultán de los mamelucos de Egipto Malik al-Kamil, en 1219, fue oficialmente confiada a la Orden Franciscana en 1342 por el Papa Clemente VI.
Están presentes sobre el terreno otras divisiones, como los Christian Brothers de Nueva York, que mantienen la única universidad privada en Belén, la Universidad de Belén, o la Congregación Salesiana, que con sus escuelas de artes y oficios tanto en Nazaret como en Belén educan a las futuras generaciones.
Por cierto, estos últimos tienen una viña y bodega en Cremisan, en la cercanía de Belén, que compite con los mejores vinos de la Rioja, Chile o Mendoza.
En muchos barrios palestinos la alegría y la gritería proviene de los patios de recreo de escuelas atendidas por los Hermanos Maristas.
A la llamada Tierra Santa vienen curas y monjas, y no tan solo a rezar o peregrinar.
Vienen a educar, asistir ancianos, enfermos, abandonados sin preguntar a qué religión pertenecen o qué ciudadanía poseen.
Las divisiones del Papa se especializan en atender a los que les necesitan.
Esas son las órdenes de quien las fundó y a eso ha venido Francisco, a supervisar y confirmar.
Las divisiones por las que preguntaba Stalin y que tanto temía, no creo fueran estas.



LAS RUEDAS DE PRENSA EN EL AIRE

Jerusalén, Mayo 27, 2014
El Papa Francisco lleva tan solo dos viajes internacionales desde que asumió el pontificado.Después de agotadoras jornadas y baños de multitud, el viaje de regreso suele ser distendido y alegre.
El cansancio pasa su factura, máxime a un hombre de su edad y condición física.
Pero Francisco tiene una característica que no tenían sus predecesores: no huye a la prensa.
Benedicto le tenía un respeto y era selecto y exclusivo con quien hablaba y no recuerdo hubiera dado una rueda de prensa.
Cuando tuvo algo que decir fuera de documentos doctrinales llamaba a UN periodista y le concedía una larga entrevista, la cual era muy exquisita pero fría.
Juan Pablo utilizó y manipuló a la prensa a su capricho- o el de sus ayudantes-. Era un actor de teatro que sabía muy bien cómo moverse en los escenarios y cómo manipular la prensa.
Tenía sus encuentros con la prensa en los vuelos internacionales, pero todos los periodistas sabían muy bien qué y cómo preguntar, hasta el punto muchas veces de saber las respuestas.
El Papa Francisco es distinto.
De los dos viajes que ha hecho se recordarán más ciertas frases y expresiones hechas en el vuelo de regreso a Roma que la mayoría de los discursos o gestos llevados a cabo.
El  “¿Quién soy yo para juzgar a una persona?” le acompañará para siempre y esas simples palabras le han reconciliado en gran parte con la comunidad gay, lesbiana o transexual.
El viaje de regreso a Roma desde Israel tuvo también su rueda de prensa.
De ésta quedarán dos cosas para la reflexión, la fama y el diálogo futuro.
Una de las preguntas fue sobre el celibato: ¿Cree que la Iglesia católica puede aprender algo de la Iglesia ortodoxa? Por ejemplo en el caso de los curas casados, un asunto que se ha puesto de actualidad tras la carta que usted ha recibido de 26 mujeres enamoradas de sacerdotes...
La Iglesia católica tiene curas casados. Católicos griegos, católicos coptos, hay en el rito oriental... Porque no se debate sobre un dogma, sino sobre una regla de vida que yo aprecio mucho y que es un don para la Iglesia. Al no ser un dogma de fe, siempre está la puerta abierta.
En todas las conferencias episcopales hay normas que exigen una fuerte obligación moral y a veces legal de denunciar a los curas pederastas. ¿Qué hará usted con un obispo que no observa estas normas?
En Argentina a los privilegiados les decimos "hijo de papá" y en este problema no habrá "hijos de papá". 
En este momento hay tres obispos que están bajo investigación: uno ya está condenado y se está estudiando la pena.
No existen privilegios. Sobre este tema de los menores es un delito tan feo, tan... Sabemos que es un problema grave en muchos lados, pero a mí me interesa la Iglesia.
Quién hace esto traiciona el cuerpo del Señor porque estos sacerdotes deben de llevar a este niño o a esta niña a la santidad, y este niño, esta niña, confían.
Y estos sacerdotes en vez de llevarlos a la santidad, abusan.
Y esto es gravísimo. Es como... Es como una misa negra. …Sobre esto tenemos que seguir adelante, adelante. ¡Tolerancia cero!
No descartó la posibilidad de una renuncia al papado en caso de que no se sienta con las fuerzas suficientes, tal como Benedicto XVI hizo, y de diversos temas que afectan a la Iglesia y la sociedad, como la marginación de jóvenes y ancianos.
Estas ruedas de prensa retratan la espontaneidad, la sinceridad y la audacia de un Papa mandado a buscar a los confines del mundo. Sus ruedas de prensa suelen ser lo más recordado, lo que abre las esperanzas de que otra Iglesia es posible.

¡LO LOGRAMOS ¡

Jerusalén Mayo 27, 2014
La última jornada de Francisco en Tierra Santa ha sido de una gran intensidad.
Se dio la reunión entre las principales autoridades religiosas tanto judías como musulmanas, hubo un emotivo encuentro con varios sobrevivientes del Holocausto en Yad Vashem, lugar del recuerdo de la ignominia y degradación del ser humano, se encontró con sacerdotes, religiosos y consagrados y concluyó con una celebración de la eucaristía precisamente donde se instituyó la misma.

Uno de los momentos más intensos fue cuando se acercó en silencio a orar frente al Muro de los Lamentos.
El Papa llegó al Kotel –el nombre religioso del Muro en hebreo-, procedente de la Explanada de las Mezquitas, donde había mantenido un encuentro con el Gran Muftí de Jerusalén y pronunciado un discurso ante el Consejo Supremo Musulmán.
Sus últimas palabras habían sido rotundas: «¡Que nadie instrumentalice para la violencia el nombre de Dios!»
El Papa se acercó al Muro, apoyó en él su mano derecha y permaneció en silencio. A continuación rezó dos oraciones y, siguiendo la costumbre judía, depositó cuidadosamente los textos en un resquicio de los gigantescos sillares de piedra.
La plegaria duró un minuto y cuarenta segundos de gran intensidad mientras todos los acompañantes mantenían un respetuoso silencio.
El Rabino Skorka revelaría después que las oraciones del Papa eran el Padre Nuestro en castellano y el Salmo 122, la oración por la paz en Jerusalén.Aunque el Padre Nuestro sea una plegaria cristiana, esa petición de perdón al Padre común y la promesa de concederlo a quienes nos ofenden resultaba muy adecuada en el Lugar Santo de los judíos,
Al concluir se fundió en un fuerte abrazo con sus dos amigos, el rabino y el imam que lo han acompañado en este viaje.
El Papa estaba radiante, igual que el rabino y el líder musulmán. Habían cumplido un sueño y dado un gran ejemplo al mundo.
“Lo logramos, lo logramos” gritaban como adolescentes traviesos los tres mientras se abrazaban.
Era un viejo sueño gestado y soñado en Buenos Aires años atrás en sus muchos encuentros y diálogos.
Probablemente ese simple gesto del abrazo de tres creyentes en la fe de Abrahán pasará a la historia como un punto de no retorno en el inicio del diálogo creyente.
Unos minutos antes le había dejado dicho a las autoridades musulmanas que el nombre de Dios nunca debería ser motivo de violencia.
Después le diría a las altas autoridades religiosas judías Juntos podremos dar un gran impulso a la causa de la paz; juntos podremos dar testimonio, en un mundo en rápida transformación, del significado perenne del plan divino de la creación; juntos podremos afrontar con firmeza toda forma de antisemitismo y cualquier otra forma de discriminación.
El Señor nos ayude a avanzar con confianza y fortaleza de ánimo en sus caminos”

La paz es el sueño de todos. Se construye con gestos sencillos, con buena voluntad.
Francisco con sus gestos simples, con su respeto y su diálogo ha empezado uno.
Ojalá algún día se pueda gritar ¡Lo logramos!!


lunes, 26 de mayo de 2014

EL VIAJE DE LOS CUATRO MUROS

Jerusalén,  26 Mayo, 2014
            El Papa Francisco está llevando a cabo su segundo viaje internacional. Está repartido entre dos países y un tercero por hacer.
Ha visitado Jordania, Palestina e Israel. 
El encuentro con la figura más representativa de la Ortodoxia era la razón de ser del mismo.
            Pero en su viaje se ha encontrado con cuatro muros, los cuales marcan la vida y la historia de estos países y, quizás, del mundo.
            El domingo 24 se acercó y encontró con el muro que separa los territorios palestinos de los territorios de Israel. 
Es el muro del miedo.
El muro levantado ante el peligro de atentados, de suicidios colectivos, de miedos de la invasión del hombre bomba. 
Habría que escarbar  en el subconsciente colectivo judío de los muros que le levantaron en los pogroms rusos o en los guetos alemanes para entender este muro. 
Un muro de miedo, de tristeza, de separación. Detrás de ambos lados hay dos pueblos que sufren. 
Ambos buscan la convivencia, la paz, el respeto. Cuando se vive con miedos, el otro es siempre odiado y rechazado
            En la mañana del lunes ha visitado otro muro, el de los Lamentos. 
Recuerdo y memoria de un templo perdido, de un contacto con Dios. 
Recuerdo de su presencia en su pueblo.
Es el muro de la fe, muro que no separa, sino que sirve para llorar y recibir consuelo, que une al hombre con el El-que-Es, con Yahvé. Muro que alimenta la esperanza de un Mesías que vendrá.
           
El otro muro que ha visitado ha sido la tumba de Teodoro Hertz. Ha sido un sencillo homenaje al hombre que soñó con la vuelta a Israel, con la ruptura de tantos muros de odio, incomprensión y rechazo como habían ahogado a la comunidad judía a lo largo de casi veinte siglos. 
Fue un luchador y un creador de esperanzas. Consideró que su pueblo no podía, no debía seguir viviendo en pogroms, en guetos, en marginación por el mero hecho de ser judío. Francisco le ha rendido homenaje y ha reconocido su lucha en  la ruptura de muros, injusticias y discriminaciones.
Ha pagado la factura del rechazo por parte del Papa Pío X quien se negó de forma despectiva de la utopía de un hogar judío.
            El cuarto muro visitado ha sido el de Yad Vashem. 
El muro de la vergüenza, de la degradación del ser humano, del fracaso del ser humano. 
Durante unos años se pretendió exterminar al pueblo judío de la faz de la tierra. Se les encerró, se les aniquiló. Se les metió en unos campos y en unas condiciones de vida tras indignas de cualquier ser humano. Se levantó un muro de silencio y complicidad ante la Soah, ante el Holocausto. 
Que nunca más se lleve a cabo una masacre de tal magnitud, que no haya muro que la oculte.
            Es tiempo de destruir muros y, con los restos levantar puentes. Francisco ha dado un primer paso para la ruptura. 
Ha invitado a su casa, a Roma, a los que controlan ambos lados de los muros. Van a rezar juntos.
Comienza la Diplomacia de la Oración. Esperemos sirva para romper muros. 



SANANDO HERIDAS

Belén, Mayo 25, 2014 (Pictures by Father Tomas Del Valle-Reyes)
            La razón de ser del viaje de Francisco a Tierra Santa no ha sido la de establecer un diálogo con
autoridades tanto palestinas como judías. Se ha dado ese diálogo y, esperemos que dure por largo tiempo. Ha visto de primera mano lo que se sufre, lo que se llora y anhela en ambos lados. Y era importante que lo viera y palpara. Cuando el domingo lo veíamos en Belén subiendo al altar para celebrar la misa, nos parecía frágil y cansado. El calor y las emociones le estaban pasando factura. Eso no impidió que siguiera adelante con su programa. Le quedaba el encuentro con las autoridades israelíes y la entrada oficial en Israel, lo cual se llevaría a cabo pocas horas después. El encuentro con un viejo amigo, Simon Peres le animó el día
            Pero lo más importante, la razón de ser de su viaje fue su encuentro con el Patriarca Ortodoxo de Constantinopla.
La ruptura entre Oriente y Occidente se dio hace demasiado tiempo, en el año 1054. Mientras tanto, odios, ignorancias, afrentas de ambos lados. Hace 50 años el Papa Pablo VI se reunió con el Patriarca Atenágoras para empezar un largo camino hacia la unidad. Cumpliéndose 50 años de tal encuentro, los sucesores de ambos se han vuelto a reunir.
            Esta reunión ha tenido otro tono, otras esperanzas, otros retos. Francisco y Bartolomé se encontraron en Belén y, juntos, se dirigieron al sepulcro de Cristo. Agarrados de la mano entraron en el tempo donde se encuentra el sepulcro vacío de Cristo. Se arrodillaron para orar ante la piedra donde ungieron a Cristo antes de enterrarlo.  «Hemos venido “a ver el sepulcro” –dijo Bartolomeo en su discurso–, como las mujeres que llevaban mirra el primer día de la semana, y también nosotros, como ellas, escuchamos la exhortación del Ángel: “No tengan miedo”. Quiten todo temor de sus corazones, no duden, no desesperen. Esta Tumba irradia un mensaje de ánimo, de esperanza y de vida».
Además, prosiguió el Patriarca Ecuménico, «hay otro mensaje que surge de esta venerable Tumba, ante la que nos encontramos en este momento. 
Es el mensaje de que no se puede programar la historia; que la última palabra de la historia no pertenece al hombre, sino a Dios. En vano vigilaron los guardias del poder secular esta Tumba. En vano colocaron una piedra muy grande bloqueando la puerta de la Tumba, para que nadie pudiera moverla. 
En vano hacen sus estrategias a largo plazo los poderosos de este mundo – todo está supeditado en último término al juicio y a la voluntad de Dios. 
Todo intento de la humanidad contemporánea de programar el futuro por su cuenta, sin contar con Dios, constituye una vana presunción». Y, finalmente, recordó, «esta Tumba sagrada nos invita a vencer otro miedo que es quizás el más extendido en nuestra época moderna: el miedo al otro, el miedo a lo diferente, el miedo al que sigue otro credo, otra religión u otra confesión. 
La discriminación racial o de cualquier otro tipo está todavía generalizada en muchas de nuestras sociedades contemporáneas; y lo peor es que frecuentemente incluso impregna la vida religiosa de los pueblos. El fanatismo religioso amenaza la paz en muchas regiones de la tierra, donde incluso el don de la vida es sacrificado en el altar del odio religioso. En estas circunstancias, el mensaje de la tumba vivificante es urgente y claro: amor al otro, al diferente, a los seguidores de otros credos y de otras confesiones. Amarlos como a hermanos y hermanas. El odio lleva a la muerte mientras que el amor “expulsa el temor” y conduce a la vida». 
Francisco respondió con gran respeto a Bartolomé recordando que este lugar “nos hace recordar el drama de la separación”…  Somos conscientes de que todavía queda camino por delante para alcanzar aquella plenitud de comunión que pueda expresarse también compartiendo la misma Mesa eucarística, como ardientemente deseamos; pero las divergencias no deben intimidarnos ni paralizar nuestro camino». «Peregrinando en estos santos lugares –indicó–, recordamos en nuestra oración a toda la región de Oriente Medio, desgraciadamente lacerada con frecuencia por la violencia y los conflictos armados. Y no nos olvidamos en nuestras intenciones de tantos hombres y mujeres que, en diversas partes del planeta, sufren a causa de la guerra, de la pobreza, del hambre; así como de los numerosos cristianos perseguidos por su fe en el Señor Resucitado». 
Cuando los cristianos de diversas confesiones «sufren juntos, unos al lado de los otros, y se prestan los unos a los otros ayuda con caridad fraterna, se realiza el ecumenismo del sufrimiento, se realiza el ecumenismo de sangre, que posee una particular eficacia no sólo en los lugares donde esto se produce, sino, en virtud de la comunión de los santos, también para toda la Iglesia». 
Y no hay que olvidar, recordó el Papa, que las personas que matan a los cristianos, «no se preguntan si son católicos u ortodoxos». Este, explicó Francisco con una imagen que ya ha utilizado en diferentes ocasiones, es el «ecumenismo de la sangre. La sangre cristiana es la misma».

            Concluyeron ambos rezando juntos públicamente el Padre Nuestro. La primera vez que ambos Patriarcas, el de Roma y el de Constantinopla, Pedro y Andrés, lo hacían desde el año 1054. Demasiado tiempo. Pero ya se empezó el largo camino. 



OTRO MUNDO ES POSIBLE

Mayo 25, 2014 (Picture by Father Tomas Del Valle)
            El mensaje que podemos sacar de la visita del Papa Francisco en el día de ayer es que otro mundo es posible.
Un mundo de diálogo, de respeto, de ruptura de estereotipos y de mirar la Historia con serenidad. Mirar el pasado para sacar experiencias en la construcción del futuro.
            Todo comenzó temprano. Había mucho que hacer. Francisco llegó con 20 minutos de adelanto sobre el horario establecido. El helicóptero que lo trasladó a Palestina parece que tenía prisa para tantas cosas y gestos como a lo largo del día se iban a suceder. Parada sorpresa en el muro que separa Israel de los territorios ocupados, con oración incluida. Misa en la Plaza, recibimiento en Tel Aviv, encuentro con el Patriarca Bartolomé.
            De todo el día se extraen varias lecciones. Primera: el respeto de la vida. Sea eliminando muros,  o  ayudando a los niños a crecer y vivir plenamente la vida. Sea buscando la solución de los problemas en  la mesa de diálogo, pero un diálogo desde el respeto y la aceptación del otro como es, no como se pretende que sea. En la construcción de la casa común que es un territorio con dos estados, se tiene que ser audaz y valiente. Para empezar este diálogo ha invitado a los dos líderes de ambos pueblos a lo que mejor sabe, a lo que ninguno se ha negado, a rezar juntos en Roma, Quizás en los libros de historia las próximas generaciones lleguen a leer que El Encuentro de Oración en Roma fue decisivo para la Paz. Camp David, Oslo, Madrid han sido etapas donde los políticos se reunieron y no han logrado la paz. Francisco invita a otro diálogo, a otra forma de ver las cosas. Winston Churchill solía afirmar  que la guerra era algo demasiado importante como para dejárselo solo a los militares. Quizás habría que decir ahora que la paz es demasiado importante para que los políticos sean los únicos responsables. Cabe la oración, el encuentro sencillo y pacífico de los líderes. Francisco ha introducido un nuevo modelo de negociaciones políticas.

             

sábado, 24 de mayo de 2014

POSADA EN BELEN

Belén 24 de mayo de 2014
            Hoy he pasado todo el día en Belén. 
Tuve que venir temprano para recoger las credenciales de prensa brindadas por la Autoridad Palestina para poder cubrir la visita del Papa Francisco. Y la verdad que me quedé sorprendido.
Las calles llenas de gente, sobre todo niños, en los cuales se notaba la serenidad y la sonrisa. Por todos los rincones se veían carteles anunciando la llegada de Francisco, el visitante más ilustre de esta ciudad que siempre ha sido acogedora. En los momentos más difíciles, cuando la violencia se mascaba en las calles de Jerusalén o en zonas limítrofes, sin embargo en Belén siempre encontré serenidad, resignación y acogida.
Hoy, a todo eso se une la alegría. Pasé por fuera de varias escuelas, y el griterío de los niños era grande. Las tiendas de todo tipo están abiertas y bien abastecidas. 
Me sorprendió la gran cantidad de hoteles nuevos que se han construido y que están siendo utilizados. 
La burocracia es como en todos los países: lenta, ineficiente e inútil muchas veces. 
Al menos no es frustrante y se toman las cosas con el “ahorita” de nuestros países.
            Todos conocemos
la historia de que, con motivo de un censo, una pareja  proveniente de Nazaret tuvo que refugiarse en un pesebre porque no había lugar de hospedaje. He tenido más suerte. 
Tengo que hacer noche en Belén para poder estar la mañana del domingo en el centro de reunión de la prensa. 
Un betlemita, al saberlo, me buscó una habitación en un hotel, a pesar de que todos están llenos. 
En Belén siempre hay posada. Siempre se siente el calor del pan compartido. No en vano Belén, en hebreo, significa “La Casa del Pan”



FRANCISCO, UN PAPA EXTRAÑO

Belén 24 de mayo de 2014
            Ya está Francisco en Medio Oriente.
Empezó su segundo viaje internacional. 
Su primera etapa lo es Jordania, la siguiente Palestina y finalmente Israel. Viaje de riesgo, viaje audaz, viaje de grandes expectativas. 
Siguiendo los discursos y homilías pronunciadas hasta el momento se puede deducir cuál va a ser la razón de ser de su viaje, un llamado a la construcción de la paz
Para eso no hubiera sido necesario tanta preparación, tanto viaje pensará alguno. 
Pero en Francisco lo que asombra es, lo que diríamos en lenguaje coloquial, la letra pequeña, aquella que no se nota, que no se lee, que se obvia. 
Y en él son las cosas que dice y no están en el texto oficial. 
Por ejemplo, se le notaba molesto cuando gritó que basta ya de venta de armas, que ya es demasiado el tiempo que dura la guerra en Siria.
Se intuye que los temas en los cuales va a hacer énfasis son la paz en Siria, los refugiados sirios, la paz entre palestinos e israelíes.
            En ciertos ambientes israelíes ha desconcertado un poco que no se tenga una misa multitudinaria en el país como la tuvieron los dos Papas anteriores que visitaron Israel. 
La misa más multitudinaria se ha llevado a cabo en un estadio en un país musulmán, país por otro lado ejemplo de tolerancia, de respeto, de acogida a las diversas religiones. 
La segunda misa se llevará el domingo en la plaza de la Natividad, en Belén. 
Me indicaban los encargados de prensa de la Autoridad Palestina que no había mucha cabida, escasamente 9 mil personas. Y, finalmente, la tercera misa en un lugar muy significativo, el sitio donde según la tradición se celebró la Ultima Cena.
Apenas 80 personas caben en dicho lugar.
            Dentro de su programa de visita hay una que ha molestado a los palestinos y ha alegrado a los israelíes.
El lunes visitará la tumba de Teodoro Hertz, el fundador del movimiento de liberación nacional israelí. 
La experiencia de Hertz con el Vaticano no fue muy agradable.
El mismo narraba que se acercó al Papa Pio X para pedir ayuda en su lucha por buscar un hogar para el pueblo judío y el Papa, serio, le contestó “Ustedes mataron a Cristo y vienen ahora a pedir ayuda?”
            Ya el primer reto y grito de Francisco están dados:
“La paz es algo personal, se construye artesanalmente, y todos debemos ser constructores de paz”
            Veremos mañana domingo. Para empezar los periodistas que estemos en Belén para la celebración de la misa tenemos que estar a las 5 de la mañana en un punto de encuentro donde, escoltados por la policía palestina, iremos a los lugares asignados. 
Y la misa es a las nueve. Nos está despertando demasiado temprano Francisco. 


viernes, 23 de mayo de 2014

CLAVES DE UN VIAJE

Jerusalén Mayo 23, 2014

Encuentros ecuménicos intercristiano e interreligiosos de primera magnitud, presencia en el viaje, junto Francisco, de un rabino y un profesor musulmán, encuentros con discapacitados, pobres y refugiados, primera comunión de 1,400 niños jordanos, entrevistas con las principales autoridades de Jordania, Palestina e Israel, misas en Amán, Belén y Jerusalén…Estos son los principales “ingredientes” de la visita que el Papa Francisco está realizando a Tierra Santa, en tres intensas e históricas jornadas. ¿Cuáles son sus claves?
1.- Una peregrinación nacida inicialmente a propuesta del Patriarca Ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I.

2.- Una peregrinación ecuménica. El Santo Padre ha insistido en que el centro de su peregrinación será el encuentro con el patriarca greco ortodoxo Bartolomé de Constantinopla y los responsables de las Iglesias de Jerusalén. Ello para conmemorar y renovar la unidad expresada por Pablo VI y el Patriarca Atenágoras de Constantinopla hace 50 años, en Jerusalén.
3.- Una peregrinación especialmente querida por Francisco: Es el primer viaje internacional personalmente elegido por Francisco desde que es Papa.
4.- Una peregrinación al servicio del diálogo interreligioso. El diálogo interreligioso será otro de los ejes centrales de la peregrinación. Francisco visitará en Jerusalén los lugares más representativos del Judaísmo y del Islam y se encontrará con los principales líderes religiosos en la ciudad santa de ambas religiones.
5.- Una peregrinación por la paz, la justicia y los derechos humanos. Tendrá encuentros y diálogos con los líderes políticos de Jordania, Israel y la Autoridad Palestina.
6.- Una peregrinación para visitar a la comunidad católica de Tierra Santa. Siguiendo el mandato de Jesús a Pedro, viene a confirmar en la fe a sus hermanos.
7.- Una peregrinación a la Custodia Franciscana de Tierra Santa: Un papel capital para la Iglesia, para la humanidad y para la justicia y la paz el desarrollado desde hace siglos por los Franciscanos presentes aquí, por mandato del Papa Clemente VI, desde 1342
8.- Una peregrinación a la pequeña grey de los cristianos de Tierra Santa: los cristianos en Tierra Santa son una minoría muy minoritaria, insignificante, marginada, dividida y pobre: el 50% viven por debajo del umbral de la pobreza y el 70% están sin trabajo. Una comunidad muy pequeña (175.000 personas entre seis millones de judíos y tres millones de musulmanes), muy dividida (esos 175.000 fieles pertenecen a dieciocho Iglesias y confesiones cristianas distintas) y, como queda dicho, muy pobre.
9.- Una peregrinación repleta de signos: Tal como ocurrió ya en Brasil, Francisco no utilizará vehículos blindados durante su viaje a Tierra Santa. Usará un automóvil normal para poder estar lo más cerca posible de la gente.
10.- Una peregrinación con una triple dimensión capital: Y para expresar esta triple dimensión capital de la peregrinación papal – ecumenismo, diálogo interreligioso y visita a las Iglesias locales católica y cristianas-, junto al Papa, formarán parte de la delegación que acompañará a Francisco el prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, el presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, y el presidente del Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos. Durante el viaje, se unirán al Papa el Patriarca latino de Jerusalén, el superior de los franciscanos en Tierra Santa, y los nuncios vaticanos en estos países. Se incluyen al rabino Abraham Skorka, y al profesor musulmán Omar Abboud, presidente del Instituto del Diálogo Interreligioso en la capital argentina, ambos amigos personales del Papa.

jueves, 22 de mayo de 2014

PISANDO TUS UMBRALES, JERUSALEN

Jerusalén, 22 mayo
El talmud de Babilonia afirma
que, cuando Dios creó el mundo, hizo 10 medidas de belleza. Nueve se las concedió a Jerusalén y la otra al resto del mundo. Es poética la comparación. Pero cada vez que se sube a Jerusalén- y digo lo de subir porque está en lo alto de una montaña- se siente algo especial. Ya sea espiritual, ya sea emocional, ya sea curiosidad histórica.
Ayer, 21 de mayo subí, una vez más, a esta ciudad. Y los sentimientos afloran por doquier. El calor abruma, pero las ganas de vivir son las mismas. Según me acercaba al centro de la ciudad veía las banderas del Vaticano combinándose con la blanca estrellada de Israel. Un diálogo y un sueño. Al conversar con la gente en todos se percibía lo mismo: curiosidad, esperanza, añoranza.
Curiosidad porque no todos los días la visita de un dignatario extranjero provoca la movilización que se está dando en todo el país. Visita, por otro lado, que estuvo a punto de suspenderse. Y no por motivos de seguridad, sino por algo tan común, y que sufrimos mucho en otros países, una huelga. Los empleados del ministerio de Asuntos Exteriores estaban luchando por mejoras salariales y, al ver que la administración se trancaba, ellos hicieron lo mismo y se acogieron a un derecho: la huelga. Esto produjo una serie de contratiempos grandes, entre ellos la cancelación del viaje del primer ministro Netanhau a Colombia hace unos meses. Se temía lo mismo con el viaje del Presidente del Estado del Vaticano – así es reconocido por el protocolo diplomático internacional el Papa – Afortunadamente los servidores públicos pudieron resolver sus problemas y el viaje se puede llevar a cabo con normalidad. La curiosidad y la alegría se perciben en gran parte de la población. Una población israelí que, no olvidemos, habla español. Sobre esto último los cálculos varían, entre unos miles y cerca de medio millón. Es la compuesta por argentinos, venezolanos y colombianos, sin contar los brasileiros. Y la lengua castellana está muy presente en todos los hogares de Israel, ya sea palestinos o israelí: las telenovelas latinoamericanas, especialmente las venezolanas.
Esperanza es el segundo sentimiento que se nota entre la población. Las conversaciones de paz están, una vez más, paralizadas. Cuando se conversa con ciudadanos israelíes, la paz es el deseo más grande. Cuando la conversación es con interlocutores palestinos, el mismo sentimiento. La situación que se está viviendo en Israel en estos momentos demanda un líder que sea capaz de romper el tranque, que dé esperanzas, que ayude a cumplir el gran sueño de la paz, de la convivencia. Buscan alguien en quien confiar. ¿Un nuevo Moisés? O más cerca, ¿un Mandela? Francisco puede ser el líder que ayude en esa búsqueda. El mensaje, a no dudarlo, que pretende traer no es otro que el de la paz y la convivencia. La Iglesia, con este viaje, piensa implicarse en el proceso de paz. No hay que olvidar el papel importante que, tras bastidores, siempre ha desempeñado la Iglesia en la educación, el servicio social, la ayuda a los necesitados en esta parte del mundo. El diálogo entre las cancillerías israelí y palestina y el Vaticano siempre ha sido fluido. Me conversaba hace años el cónsul de Israel ante la Santa Sede que, para el gobierno de Israel, la embajada ante el Vaticano es una de las más importantes que el gobierno mantiene abiertas.
Añoranza es el sentimiento que aflora igualmente en todo ciudadano con el que se conversa. Sea el chofer de taxi ruso que me trajo desde el aeropuerto a Jerusalén, o el que me atendió en la recepción del hotel, o el vendedor de periódicos con el que conversé por la tarde, todos añoran poder crecer en paz, ver a sus hijos y a los hijos de sus hijos que crecen sin miedo. Añoran que aquella profecía bíblica de que vivirían en una tierra que mana leche y miel, se haga realidad. La leche que da vida, la miel que suaviza lo irritado y endulza la vida. Se espera a Francisco. Dichosos los pies del que anuncia la Paz.

lunes, 12 de mayo de 2014

LOS PAPAS VIAJEROS

Mayo 11, 2014
Una de las grandes novedades del pontificado de Juan Pablo II

fueron sus viajes.
Pero no fue ni el único ni el primero de los papas del siglo XX en viajar.
Desde que Pío IX en 1870 se encerró en los Palacios Vaticanos como protesta por la pérdida de los Estados Pontificios, ningún papa había salido de Roma hasta Juan XXIII. El “Papa Bueno” como era conocido, viajó al Santuario de Loreto y a la Basílica de San Francisco de Asís. Su sucesor, Pablo VI, realizó 10 viajes.

Fue el primer papa en visitar el continente americano: Nueva York en 1965 y Bogotá en 1968.
La prematura muerte de Juan Pablo I impidió que realizara una visita a México. Juan Pablo II a lo largo de su pontificado hizo 104 viajes fuera de Italia y 146 en la misma Italia.
Francisco, aun cuando no se espera que lleve a cabo muchos viajes, sin embargo ya tiene las maletas listas. Dentro de Italia ha llevado a cabo varios.
El primero fue a las playas de Lampedusa, la puerta de entrada de emigrantes indocumentados a la vieja y degenerada Europa.
Fue un viaje de encuentro y denuncia. Encuentro con los que buscan un futuro y una vida mejor en la mítica Comunidad Europea, como si de una Tierra Prometida se tratara. Y también denuncia: cómo se trafica con seres humanos como si no tuvieran dignidad. Fuera de Italia el viaje más importante ha sido el realizado a Brasil. Allí se encontró con las fuerzas vivas y el futuro de la comunidad católica.
En la playa de Copacabana se entremezclaron jóvenes brasileños junto con personas llegadas de lugares tan insólitos como Iraq, Líbano o los mismos territorios palestinos. Se acercó a la periferia y al futuro.
El próximo viaje de Francisco es a una zona de alto riesgo según los creadores de opinión y de algunos llamados periodistas que no salen de las salas de redacción o se nutren de las páginas y buscadores de internet.Va a visitar Jordania, los territorios palestinos e Israel. La razón oficial de este viaje es la conmemoración del encuentro entre Pablo VI, Papa de Roma con el Patriarca Atenágoras de Constantinopla, la figura más representativa de las Iglesias Ortodoxas. Hacía 910 años que no se había dado un encuentro entre ambos patriarcas. Fue el comienzo oficial del deshielo y la desunión de las dos Iglesias, la de Occidente y Oriente. El sucesor de Pedro, el papa, y el sucesor de su hermano Andrés, el patriarca de Constantinopla, la actual Estambul. Se levantaron las mutuas excomuniones. Se comenzó un largo caminar hacia la unidad del cristianismo.
Este año 2014 se cumplen los 50 años de aquel encuentro. Francisco, con una gran visión de futuro, quiere recordar este medio siglo donde ocurrió acompañado por el sucesor del Patriarca de Constantinopla y de diversos patriarcas orientales. Se reunirá y orarán juntos en el Santo Sepulcro.
De paso será acogido por los hermanos mayores en la fe, los judíos, y los lejanos hijos de Abrahán, los discípulos del profeta Mahoma. Lo acompañan en la comitiva un rabino judío y un imán musulmán. Van a visitar Jerusalén, la morada de un Dios, la capital de dos pueblos, el templo de tres religiones.
Descubriendo el Siglo XXI, en la persona de este columnista, será testigo.
Tertuliasiglo21@aol.com

jueves, 1 de mayo de 2014

UN HOMBRE LLAMADO JUAN

Mayo 4, 2014
Los medios de comunicación
y las nuevas tecnologías nos han hecho hijos de lo inmediato, del ahora para ahora, del ya. Y poco a poco hemos ido perdiendo una gran cualidad, la del saber mirar hacia atrás y aprender de los personajes, las situaciones históricas, las experiencias de la vida. No hay nada más viejo que el periódico de ayer, nos recalcaban en las clases de periodismo. Por eso no es de extrañar que Juan XXIII sea un perfecto desconocido para mucha gente. Cuando el domingo 27 de abril la Iglesia, a través del Papa Francisco, declaró que tanto Juan Pablo II como Juan XXIII podían ser venerados en la comunidad creyente como santos, para muchos este último era un perfecto desconocido.
El Papa polaco desde los inicios de su pontificado inundó los platós de cine, los estudios de televisión, las redacciones de radio y periódicos. Fue el gran actor de teatro que, con sus cualidades y destrezas, supo desempeñar el papel que todo actor sueña. El texto a declamar tenía cerca de dos mil años de redactado. No era otro que el evangelio leído, vivido y recitado para los hombres y mujeres del siglo xx, un siglo lleno de angustias, guerras y dolores. El gritó y actuó brindando esperanza.
El otro acompañante en la gran fiesta de la canonización es menos conocido. Pero sin él y su audacia, su visión del mundo y de la Iglesia, no hubiera sido posible el Papa Polaco.
Angelo Giuseppe Roncalli era hijo de una familia campesina. Junto a ella aprendió a leer los signos de la naturaleza. Su astucia le venía de saber combatir plagas, romper terrones de tierra, espulgar las vides y un largo etcétera. Pronto entró en la vida eclesiástica, pero no olvidó sus orígenes. Esos le ayudaron a saber sembrar para poder recoger, a tener la astucia suficiente para moverse entre los pasillos de las cancillerías y los despachos de la Curia. Sin haber pasado por escuelas de diplomacia o de administración de empresas, fue delegado pontificio en los países eslavos, en esas delegaciones que nadie con deseos de prosperar en el cuerpo diplomático deseaba ocupar. Era considerado en la
Cancillería Vaticana como “el campesino de la diplomacia vaticana” Hombre bueno, hombre sencillo, hombre obediente. Pero hombre astuto, sincero y audaz. Con su sonrisa y su humanidad logró bajarle los humos a la arrogante presidencia francesa que miraba despectivamente a la Iglesia y su actuación durante la segunda guerra mundial.
En sus ratos libres el “campesino del cuerpo diplomático” se había acercado a la periferia de la Iglesia, a los lugares del dolor, la soledad, la tristeza, el abandono. Se dio cuenta de que era más lo que unía a los creyentes que las pocas cosas que les separaba. Supo escuchar el clamor del pueblo con el que se mezclaba ya que era uno más del pueblo, un campesino. Hablaba el mismo lenguaje de la gente. Lo que después Francisco, uno de sus sucesores, llamará el olor a oveja.
Una vez llegado al papado tuvo una visión más amplia de la Iglesia de la que había tenido su predecesor, Pio XII. Y decide convocar a toda la familia creyente para devolver el rostro auténtico de Cristo a la Iglesia.
Para restañar las heridas causadas por la Revolución Francesa que nunca antes se habían curado y cicatrizado. Sin la reforma, la apertura, el curar heridas no hubiera sido posible el Concilio. Ni Pablo VI. Ni Juan Pablo I. Ni Juan Pablo II.
De Juan XXIII poco se sabía cuando fue elegido Papa. Y menos se sigue sabiendo cincuenta años después. Tan solo se contaban anécdotas, muchas de ellas falsas. Lo que sí presentaban era a un hombre bueno, audaz, con visión de futuro y con sólidas convicciones religiosas.
Cuando falleció no dejó títulos ni bienes a sus parientes. Tan solo su “Diario del alma” cuaderno donde, desde los 14 años, fue escribiendo sus experiencias espirituales, sus desahogos, sus alegrías y penas, sus esperanzas y tristezas. Que después haya acompañado a Juan Pablo II en la subida a los altares no es de extrañar. Era un hombre bueno. Era Juan, otro precursor.